DE ENREDARNOS EN UN BESO.

Por qué no te invité a dormir sentados en las escaleras esperando a que dijeras que la vida es mejor en compañía. Sentados en una orilla viendo a los demás pasar. Como yo tampoco dije nada,  aquella noche fue la vez que más cerca estuvimos de enredarnos en un beso, de mezclarnos bien por dentroAquella noche fue la vez.
Por qué no no no no te invité ni te invité ¿Por qué no te invité a dormir?
Como tú nunca dijiste nada, tienes tanto que perder... Se nos fugó la noche de jugarnos en un beso lo bueno de los momentos. Tú ya sabes... nunca tuve apenas nada que perder.